Ante una espera que se considera injustificada, un diagnóstico desfavorable, o un fallecimiento poco esperado, la reacción de los pacientes o sus familiares es: 1) Insultar y/o pegarle al médico y a las enfermeras 2) Romper las instalaciones del Hospital. Esto es cada vez más frecuente, ante la intranquilidad social, la inexistencia de controles, y falta de sanciones severas que desalienten estas acciones. Vemos un vidrio de la guardia roto por paciente insatisfecho, que se cortó, y tuvimos que atenderlo en la misma guardia que había atacado.
Si tenés algun tipo de reacción defensiva, te echan del Hospital.
Horrible son ése tipo de situaciones, pese que uno intenta por todos los medios comprender el dolor del otro es imposible justificar semejante forma de expresar sus sentimientos.
ResponderEliminarSiempre es un placer ver sus posteos, un saludo!